Hace un año y medio tuve a mi segunda bebé y, a pesar de que con mi primero mi recuperación fue rapidísima, no me esperaba el cambio que habría en mi recuperación el hecho de tener un parto en casa y una partera profesional con todos los mejores cuidados postparto de las abuelitas y también de la ciencia en su bolsa.
Me parece increíble que estos remedios naturales y tan efectivos no se encuentren tan fácilmente y, si se encuentran, normalmente las nuevas mamás no confían en ellos. Te lo digo porque yo era una de ellas, al inicio pensar en ponerme cremas o alcohol, masajes, fajarme o algún remedio que sonara como de abuelita decía «claro que no». Después de mi primer parto me di cuenta que mi experiencia puedo haber sido infinitamente mejor si no hubiera confiado tanto en mi ginecólogo, la historia la puedes encontrar en el artículo en el que cuento todo acerca de mi parto en casa.
Me parece súper importante comentarte que «recuperarte» para mi significa sentirte bien. Nada de «llegar al peso que tenía antes del embarazo» o «tener el abdomen plano de nuevo». Recuperarte de un parto natural es sanar el físico pero también, y tal vez más importante, la mente. Con mi partera aprendí que la mente tiene grandes poderes y hablarle a tu cuerpo y sanar la mente te ayudará muchísimo en este proceso.
Recuerda que existen 3 tipos diferentes de puerperio o postparto que son:
- Puerperio inmediato: Las primeras 24 hrs
- Puerperio mediato: Hasta el décimo día
- Puerperio alejado: Hasta los 40 días
1. Parir como tu desees
Ya sé que la mayoría de las mujeres que lean esto ya van a haber parido, pero ojalá y les quede para su siguiente bebé o para alguna de las mujeres de su alrededor: Parir en la posición que tu desees (que debo decir que tu no la planeas, sólo la sabes en el momento en el que quieres pujar) es el principal factor para recuperarte rápido ya que evita lastimarte de más y hay estudios científicos al respecto, aparte de que es lógico. Las mujeres sabemos parir desde siempre y desde hace pocos años es que empezamos a parir acostadas en una plancha.
En fin, todavía es difícil encontrar ginecólog@s que te permitan el libre movimiento y parir como tu desees, por ejemplo, en León Guanajuato no hay, por eso opté por parir en casa, aunque en otras ciudades puedes encontrar algunas que incluso te ponen analgesia y siguen sin restringirte.
2. Come fibra
No hay nada peor, después del parto y la lactancia claro, que la primera vez que tienes que ir al baño después del parto. Hacer pipí es feo pero hacer popó es horrible, sientes que vas a parir de nuevo.
Por esto, de verdad, el mejor cuidado postparto es comer mucha fibra y tomar mucha agua. Esto hará que tu primer ida a hacer popó no sea tan mala.
3. Botella perineal
Utilizar una botella perineal con infusión de manzanilla o simplemente con agua fría es lo mejor que puedes pedir después de ir al baño. Te relaja, desinflama y hace innecesario que te talles para limpiarte, por lo que lo único que tienes que hacer después es secarte con pequeños toques y ya. ¡Agradecerás esto especialmente si en el parto tuviste algún desgarro o episiotomía!
4. ¿Cuándo me puedo bañar después del parto?
La verdad es que esta es una pregunta que tú tienes que contestar. ¿Cuándo te sientes con fuerzas? ¿cuando te puedes levantar sin marearte, después del parto? Cuando tu te sientas con fuerzas, puedes bañarte. Eso si, y lo más importante, báñate mientras alguien te esté cuidando, no te quieras hacer la independiente, ¡acabas de traer una vida al mundo! deja que te apapachen
En cuanto a tomar baño sumergida en agua hay diferentes opiniones. La tradicional que te mencionan l@s ginecolog@s en México es no meterte a albercas ni jacuzzis. Todo normal, pero también contraindican el darse un baño de asiento o baño en la bañera. En cambio, en otros países y contextos es normal dar baños sumergidos a puérperas y hasta se recomiendan como un cuidado postparto. Por ejemplo, el manual de la OMS habla de tomar un baño (bath) y no de ducharse (shower) y no aparece ninguna contraindicación de sumergirse. En fin, como todo, al final es tu decisión.
Por otro lado, cualquier baño que elijas te dará una gran sensación de confort, descanso y te recarga la pila.
5. Tés para el postparto
Creo que no hace falta mencionar que los bebés recién nacidos y hasta después de los 6 meses no pueden tomar ni comer nada que no sea leche materna o fórmula, ¡súper importante! Ni siquiera agüita o té.
Empezando por los tés postparto para mamá es importantísimo mencionarte dos cosas:
- Asegúrate de que las hierbas vienen de una fuente confiable, ya que a veces pueden confundirlas con otras tóxicas, enevenamientos con metales pesados o infecciones por bacterias y hongos.
- No tomarlos en exceso, ¡recuerda que los medicamentos vienen de plantas! Lo natural no es inocuo por ser natural.
- Si tu interés por tomar tés es porque quisieras que te ayudara en la producción de leche, déjame decirte que no existe ninguna evidencia científica de que alguna hierba ayude, por lo que podría ayudar es por la ingesta de líquidos que se tiene y obviamente el efecto relajante que puede tener en ti.
Algunos tés recomendados para el postparto son:
- Manzanilla
- Tila
- Tomillo
- Menta
- Melisa
- Jengibre
- Hinojo
Hay algunos tés que son prohibidos en el postparto, te recomiendo que cheques el té que te quieres tomar en elactancia o con tu doctor@.
6. Pies hinchados en el postparto
Es normal que en el postparto tengamos los pies hinchados, pero si esta hinchazón dura mucho tiempo, tienes una pie más hinchado que el otro o se agregan otros síntomas como visión borrosa, migrañas, etc. es un signo de que debes de consultarlo con tu doctor@.
7. Toallas postparto
Uno de mis mejores cuidados postparto, que de verdad se siente genial, son las toallas postparto. Si le das click al link te enseño cómo hacerlas ¡en tu propia casa!
8. Quédate desnuda
Para poder cicatrizar rápidamente tus heridas, el mejor cuidado postparto que puedes hacer es quedarte desnuda. Tanto para heridas, desgarres o episiotomía que hayas tenido en el parto como para los pezones lastimados por la lactancia, la mejor estrategia es dejar las heridas al aire, ya que el taparlas provoca que se humedezcan y tarden en sanar.
9. Vigilar los loquios y entuertos
Los loquios es lo que queda en tu útero después del parto: coágulos, sangre, moco y tejido placentario. Hay momentos en los que puedes verte los coágulos acostada, ya que forman montañas en la parte baja de tu abdomen.
Es importantísimo que los vigiles y estés en contacto con tu médico para que te revise. El chiste es que salga todo y puede tardar en salir toda la cuarentena e incluso un poco después.
Aquí aprovecho para poner también los entuertos, que son esos dolores fortísimos los días siguientes al parto en los que el útero va haciéndose pequeño hasta regresar a su tamaño original. Duelen horrible, en mi caso, y son peores cuando das pecho.
10. Plan de postparto: Pide ayuda
Este plan en teoría se hace antes de dar a luz, pero de todos modos lo pondré aquí: Es básico que tengas a alguien que se encargue de la comida, de las compras de despensa y de la limpieza. Tú NO debes hacer nada más que crear lazos con tu bebé recién nacido.
He leído que hay muchas mujeres que no tienen apoyo de su pareja para estos casos y que a los 2 o 3 días ya andan cocinando o trapeando. Entiendo que no todas tenemos los mismo privilegios de tener pareja, mamá, familia o amigas que nos apoyen en estos casos, pero en este caso trapear no es prioridad, tener tu casa limpia no es prioridad. Ahorita la prioridad es que tu y tu bebé estén alimentados y ya. También espero
11. Dormir
Ya sé que esta es la peor recomendación del mundo ya que ¿quién puede dormir cuando tiene un recién nacido?. Es horrible y a veces te la pasas toda la noche despierta y en el día no puedes dormir, créeme, he estado ahí y por eso te doy este consejo. Tengo 1 año y medio de lactancia materna y estoy hecha un zombie.
Ser la única responsable de un bebé es lo más pesado que puede existir, en especial lactancia materna exclusiva. Así que te pido que te des la oportunidad de dormir. No vas a ser mala madre si tu bebé llora mientras está con su papá, no vas a ser mala madre si te extraes leche y alguien más se la da en biberón, no vas a ser mala madre si le das fórmula, pero ¡si vas a ser mala madre si no duermes! ¿Haz visto lo irritables que somos si no dormimos? Somos horribles. Gritamos, lloramos, estamos de mal humor, ansiedad, depresión, todo se suma.
Así que por favor, ¡duerme!
12. Fajarse
¿Usar faja es una buena idea? En mi caso no la utilicé, ya que me recuperé rapidísimo y no me gusta estar apretada. En este artículo me concentro en el postparto de un parto natural, no en cesárea que es totalmente otra recomendación.
No es recomendable usar faja inmediatamente después del parto, se podrían usar hasta casi cuando cumples la cuarentena ya que en el caso de un parto natural, el piso pélvico y el perine están débiles, por lo que el usar faja supondría una gran presión en esa zona. No están probadas para formar tu figura, si no que sólo la esconde. Si la usas mucho tiempo, los músculos se debilitan, ya que no tienen que hacer fuerza para mantenerte derecha.
En fin, revísalo con tu ginecólog@ para ver que te recomienda, no te preocupes.
13. Lactancia materna
Tal como menciono en el punto pasado, la lactancia materna es la cosa más pesada del mundo y tienes que hacer todo lo posible porque se te haga aunque sea un poco más fácil.
Al inicio, a la mayoría de las mujeres nos sangran los pezones, nos duele y es horrible. Llama a una asesora de lactancia para que venga a tu casa. Ella te dirá exactamente como te tienes que poner a tu bebé, técnicas para que no duela, para que no te lastimes la espalda, cómo sanar tus pezones. Como darle biberón o fórmula en caso de que se necesite y te preparará para que tengas éxito con la lactancia.
En mi caso, a pesar de tener un parto en casa y apego inmediato con lactancia exitosa, días después y gracias a la asesora de lactancia nos dimos cuenta de que tenía frenillo corto, lo que le impedía mamar bien. En fin, a los 3 meses la operamos (que es mucho más fácil y común de lo que te imaginas) y con eso logramos que me vaciara los pechos y ya no tuve obstrucciones mamarias. Sin una asesora de lactancia quien sabe si hubiera identificado el problema y tal vez hubiera seguido sufriendo, me hubiera dado mastitis o hubiera abandonado la lactancia materna sintiéndome la peor madre del mundo.
Por cierto, dar pecho ayuda a que le útero se contraiga, por eso puedes sentir los entuertos más fuertes cuando tu bebé está pegado.
Y para terminar, hazlo lo más fácil posible:
- Coloca la cuna o el colecho a un lado de tu cama para que no tengas que levantarte mucho
- Refuerza tu autoconfianza: Tu leche es suficiente y es el mejor alimento que le puedes dar
- Conoce las crisis de crecimiento o brotes de crecimiento: Son momentos en los que parece que «no los llenas», lloran mucho y quieren pecho a cada rato, pero en realidad es totalmente normal, el primero es a los 17-20 días de nacido.
- Si tienes dudas, contacta a una ¡asesora de lactancia! de verdad que es padrísimo estar con alguien que te echa ánimos, que te enseña posiciones para estar más cómoda y te guía por el buen camino para que no dejes la lactancia, es un camino difícil y una asesora de lactancia es un gran apoyo.
- Si te vas a sacar la leche normalmente, compra un buen extractor eléctrico y busca a una asesora de lactancia para crear tu banco de leche
- La lactancia materna es muy difícil, pero es lo mejor para tu bebé, por eso tu deber es hacértelo lo MÁS fácil posible. En cuanto mi bebé pudo tomar leche estando acostada, aproveche para hacer TODAS las tomas de esa manera ya que es mi forma más cómoda. ¿Por qué dificultarte dándole sentada cuando estás en tu casa? Entiendo que a veces sentimos que estamos «de flojas» por estar acostada casi todo el día dándole pecho a tu bebé, pero no vas a ganar más puntos por lastimarte la espalda.
14. Cierre de caderas/ masajes de senos
Una de las cosas que más me gustó de aliviarme con una partera fueron todas las cosas raras que siguieron (si es que no es suficientemente raro que aún haya manchitas de sangre en mi recámara). Días después de que nació mi bebé mi partera me realizó un cierre de caderas, que es un ritual de bañarte con hierbas, darle gracias a tu cuerpo por lo que hizo por ti en el parto, decirle que ya estas en un lugar seguro y después te envuelven en toallas calientes para «reposar el baño».
Yo sangré un gran tiempo después de tener a mi bebé y cuando le dije a la partera esto, me dijo que hablara con mi útero para decirle que ya podía dejar de sangrar. No me malentiendas, de verdad que soy muy de mente abierta y la verdad es que cada que leo que alguien piensa cosas cuando alguien le dice cosas locas nunca me lo creo, PERO cuando mi partera dijo eso dije «ya esto es demasiado hippie», no puede ser que hablar con mi útero ayude.
Obviamente lo intenté, me puedes tachar de cualquier cosa, pero de alguien que no prueba ideas locas, definitivamente no. Siendo sincera, no recuerdo si funcionó o no, pero a los pocos días paró.
Por otro lado, en la cita de seguimiento después del parto, mi partera fue a revisarme a mi casa. Quedé estupefacta cuando sacó un botecito de pomada para ayudar a mi panza a reacomodarse y desinflamar, me preguntó cómo me sentía (ojo, ¡importantísimo!, lo veremos en el punto 17), me preguntó por mi lactancia y me ayudó ¡dándome un masaje en mi pecho!. Pfff, me sentía volando en las nubes, ya que mis pechos estaban inflamados y doloridos. Este masaje fue lo mejor del mundo, siempre te recomiendan darte masaje, pero alguien más te o de es una joya.
15. Relaciones sexuales en el postparto
En primer lugar puedes tener relaciones sexuales cuando tu te sientas segura, algunas se sienten bien pocos días antes de la cuarentena, otras hasta 4 meses después de que nació el bebé. Lo más importante es que cuando tomes la decisión se porque TÚ quieres, sin presiones y sin miedo a «es que si no lo hago…». Nunca esta demás decir esto, ya que la mente de una puérpera es un desmami.
Por otro lado, es importantísimo que sepas que, aunque no te baje, ¡si puedes quedar embarazada! Aunque sea antes de que termines de sangrar por la cuarentena, aunque ya haya pasado un año y no te haya bajado: Si 👏🏼 te 👏🏼 puedes 👏🏼 embarazar.
Por cierto, ¿cómo es que nadie te dice que puede no bajarte si estás lactando? Actualmente tengo 1 año y medio, ya sólo le doy pecho en la noche a mi niña y todavía no me baja.
16. Mejora tu suelo pélvico
Nadie me lo había comentado (y nadie habla de eso), pero después de mi primer hijo duré tiempo con pequeñas fugas de pipí cuando hacía mucho esfuerzo, por ejemplo, cuando brincaba en el brincolín y quería saltar muy alto, me sucedía. La verdad es que pensaba que era «normal» hasta cierto punto, sólo me sucedía 1 o 2 veces al año, cuando iba a los brincolines.
En ese tiempo, me llegó una publicidad en la que decía «¿tu suelo pélvico es como un huevo roto después de tener a tu bebé?, ¿tienes pequeñas fugas de pipí?», ahí fue cuando entendí que no era normal y que se podía arreglar.
Después de una pequeña investigación encontré que los fisioterapeutas te pueden evaluar para determinar qué tienes que hacer para llegar a tu cuerpo óptimo (y con lactancia incluida), incluso también en el embarazo. Algunos de los ejercicios que he estado haciendo han sido los típicos Kegel e hipopresivos (ve con alguien para que te explique bien, a veces incluso los entrenadores en gimnasios saben) y si he notado la diferencia.
17. Lo más importante: Puerperio psicológico
Ufff, lo dejé para el final porque si hay algo con lo que quiero que te quedes es con esto: Tener un bebé es un proceso que te pega con todo emocionalmente. Eres un DesMami andando entre tus emociones, la recuperación del parto, la lactancia y la falta de sueño.
Lo he escuchado algunas veces, pero creo que nunca me lo había tomado tan en serio como ahorita (un año y medio después de que nació mi bebé y que ya ando como zombie por no haber dormido ninguna noche completa): Si tú como mamá no estás bien, NADIE en tu casa va a estar bien: Ni tu bebé, ni tus otros hijos, ni tu esposo. NADIE.
Necesitas darte prioridad. No hacer nada de comida, de quehacer, ni nada que no sea recuperarte. Entiendo que es un súper privilegio para muchas no hacer nada, por lo que te propongo que crees tu plan de postparto que espero escribir pronto, por el momento puedes buscar en Google alguno, donde hagas planes para todo lo que viene y puedas descansar más.
Si tienes pareja, lleguen a un acuerdo al respecto de todo lo demás y DEJA que lo cumpla.
En mi caso, me enojaba mucho porque cuando mi pareja se quedaba con mi bebé, nada más escuchaba que lloraba e iba corriendo enojada, la agarraba y me la llevaba sin decirle nada a mi pareja. En mi mente: «Es que claro que nadie puede hacerse cargo de mi bebé, tengo que ser yo porque le doy pecho, sólo conmigo está bien, sólo conmigo se calma». Pero que acaso al inicio ni tú misma sabías cómo calmar a tu bebé, ni sabías cómo darle pecho, ni cambiarle los pañales. Es normal que cuando tu pareja se empieza a hacer cargo del bebé pues el bebé llora porque ninguno está acostumbrado. Tienes que dejar que se haga cargo, a lo mejor al inicio no le da bien el biberón, no lo baña bien, no le pone la ropa que debe de ponerle, etc. pero uno nunca aprende si no hace las cosas. Y tú necesitas descansar.
Necesitas a alguien con quien desahogarte y contar lo que sientes. No sabía que lo necesitaba hasta que mi partera me preguntó ¿cómo te sientes emocionalmente? Wow. No necesitan «hacerte sentir mejor», necesitas desahogarte nada más, palabras de reafirmación y ya. La verdad es que me la he pasado quejándome de todo jajaja y me ha ayudado a superarlo todo también.
Apenas hace dos meses estaba platicando con mi psicóloga sobre porque unas semanas antes había decidido cambiar de carrera y estaba convencida de que era mi sueño para toda la vida y derrepente ya no lo quería. Me platicaba que después del parto las madres sufrimos despersonalización, ya que nos abocamos a cuidar al bebé y no sabemos muy bien qué queremos nosotras de nuestra vida. Ojo, yo ya tenía año y 4 meses de que había nacido mi bebé, me dijo que eso no importaba, para cada mujer es diferente.
Por otro lado, después de mi primer hijo tuve depresión postparto y no me atendí hasta 4 años después, porque no sabía que necesitaba atenderme. Es normal tener «baby blues», tristeza en los siguientes días o semanas después de que nace tu bebé, pero si sientes que ya te pasaste, ¡atiéndete con un psicolog@! No te esperes años, porque después es peor.
Y hasta ahí termino mis recomendaciones, espero que te puedan ayudar muchísimo a recuperarte rapidísimo y tente paciencia, parir un bebé no es nada fácil (aunque nos hagan pensar que si, porque todas lo hacen) pero eres mágica y poderosa, todo va a llegar.